Mis juegos de pequeño fueron premonitorios. Utilizando un viejo aparato que simulaba un micrófono jugaba con mi vecino a la radio, leyendo los avisos del diario y cables de la Agencia Télam que me daba un compañero del Colegio San José cuyo padre trabajaba en la misma.

Luego los sábados y domingos mientras escuchaba los bailables de la radio, me sentaba frente a un espejo con ambos tarros de lata y simulaba estar tocando el bongo, como si fuese parte de la orquesta.

Mi padre era buen guitarrista y cantor y fue el que me enseño los primeros acordes, los temas que cantábamos a dúo eran folclóricos, recuerdo que en toda reunión familiar me decía: "dale viejito saca la guitarra que le damos", al principio me agradaba, pero con el correr del tiempo me molestaba bastante, dado que tenía que abandonar los juegos propios de la edad, lo hacia para no contradecirlo. Siempre los mismos temas, "Luna Tucumana"; "El arriero" etc., hasta que un día cuando ya tenía cerca de los quince me fui desligando de esa práctica.

Esto me sirvió para meterme de lleno en la música, allá por el año 1956 con 15 años de edad debuto en una orquesta como cantante, no era de las mejores pero sirvió para romper el fuego, luego pasé a una superior, y a partir de allí no deje la actividad en ningún momento.

A medida que pasaba el tiempo iba tomando más confianza y mejoraba mi técnica, esto hacía que el dinero fuese viniendo con más facilidad. Integré las mejores orquestas de la ciudad de La Plata, trabajé en todos los centros de diversión nocturna, clubes, cabarets, boites, etc., hasta que llegó el día que decidí, con la ayuda de un amigo, partir hacia la capital, en donde integré otras orquestas que por entonces eran conocidas a nivel nacional y actuaban en prestigiosas radios y canales de TV, (Radio "El Mundo"; "Belgrano"; "Canal 7, 9 y 13", como así también en encumbrados sitios nocturnos.

Era la época en que la calle Corrientes nunca dormía. yo, entre tantas gente, me abría paso raudamente para salir de un confitería y trasladarme a otra para cumplir con una nueva actuación, luciéndome junto a mis compañeros con los elegantes uniformes que nos identificaban como profesionales de la música.

En 1975 además de cantar, presentar las orquestas y con estudios musicales, comienzo a trabajar como locutor en Radio Universidad Nacional de La Plata. Con el tiempo dejo el canto y sólo me dedico a la radio a la vez ingreso a la Agrupación Sinfónica de la Policía de la Provincia de Buenos Aires.

Por entonces seguía mi actividad de maestro de ceremonias en "Caño 14" ( La catedral del tango en Buenos Aires), en donde hice invalorables amigos del género, muchos de ellos que ya partieron.
Esta etapa fue la más dura, volvía de capital a las 4 de la mañana, y a las 8 estaba en el Teatro del Lago "Martín Fierro" en donde tenía su asiento la banda de música, de allí partía a radio Universidad en donde cumplía turno hasta la 5 de la tarde, regresaba a casa disfrutaba un rato de mis hijos y cerca de las 21 hs., partía nuevamente a capital, bien afeitado, con traje y corbata diferente. Esto lo hice durante cuatro años, hasta que cierto dije basta.

Volví a trabajar a La Plata, aunque esporádicamente realizaba algún trabajo importante en Buenos Aires, grabaciones y actuaciones en radio y TV por ejemplo "Remates Musicales con Roberto Galán" en el viejo Canal 9.

A partir de allí solo continue con la radio, Universidad y otras tantas. Pero día tras día buscaba más actividad, incursione en el teatro con una comedía, "Mi Conito de Chocolate" con cuya compañía actúe en la Comedía de la Provincia, las Salas del Pasaje Dardo Rocha, Coliseo Podestá y también innumerables giras por el interior de la Provincia de Buenos Aires. Más tarde también me di el gusto de escribir dos libros; "La historia de mi Barrio" y "Contemos La Plata" (para saber cuanto valemos), en este último relato mis actividades dentro del arte junto a otros destacados personajes de la ciudad.

También por entonces me dedique a la publicidad, la locución comercial de las transmisiones de fútbol en diferentes radios durante 20 años, forme mi agencia de representaciones artísticas, "WD Producciones" con la que organizaba todo tipo de eventos musicales, como así también las Cenas Anuales del empresariado platense.

Más tarde, habiendo completado mis estudios de periodista comienzo a escribir en diferentes diarios y revistas, como también en Internet, y produje algunos programas en Radio y Televisión como tal.

La parte que más me atrapó de esta última actividad, fue la investigación, eso me llevó a bucear el pasado de los músicos y comencé con mi colección privada de fotos que expuse con el nombre de "Música Maestro" y mostraba músicos y orquestas populares de La Plata entre los años 1930 a 1990, tuvo una gran repercusión, esto me motivo a seguir rastreando el pasado para armar la historia de Punta Lara desde 1920 a 1967.

Fue así que conocí al periodista e historiador Roberto Abrodos responsable de (www.laplatamagica.com.ar) con quien estreche una gran amistad, sintiéndome muy satisfecho en poder colaborar con tan excelente página.

Música, Radio, Televisión, Teatro, Publicidad, etc., me han dado muchas satisfacciones, la mayor cuando luego de haber obtenido numerosos premios llega el máximo el "Martín Fierro" de APTRA (Asociación de Periodistas de la Televisión y Radiofonía Argentina) por mi programa "RITMOS Y SONES DEL CARIBE" en el rubro Mejor Musical Educativo.

He sido feliz en toda mi actividad y podría decir que nunca trabajé, solo hice lo que me gusto…y aún recuerdo cuando mi padre me decía: "dale viejito saca la guitarra que le damos".

Willy Dante